domingo, 15 de mayo de 2016

EL BUITRE EL MURCIELAGO Y LA ABEJA (LA FE)


EL BUITRE

Si pones un buitre en un cajón que mida 2 metros x 2 metros y que estè completamente abierto por la parte superior, esta ave, a pesar de su habilidad para volar, será un prisionero absoluto. La razón es que el buitre siempre comienza un vuelo desde el suelo con una carrera de 3 a 4 metros . Sin espacio para correr, como es su hábito, ni siquiera intentará volar sino que quedará prisionero de por vida en una pequeña cárcel sin techo..

EL MURCIÉLAGO
El murciélago ordinario que vuela por todos lados durante la noche es una criatura sumamente hábil en el aire, pero no puede elevarse desde un lugar a nivel del suelo.
Si se lo coloca en el suelo en un lugar plano, todo lo que puede hacer es arrastrase indefenso y, sin duda dolorosamente, hasta que alcanza algún sitio ligeramente elevado del cual se pueda lanzar a si mismo hacia el aire.
Entonces, inmediatamente despega para volar

LA ABEJA.
La abeja al ser depositada en un recipiente abierto, permanecerá allí hasta que muera, a menos que sea sacada de allí.
Nunca ve la posibilidad de escapar que existe por arriba de ella, sin embargo persiste tratando de encontrar alguna forma de escape por los laterales cercanos al fondo.
Seguirá buscando una salida donde no existe ninguna, hasta que completamente se destruye a si misma.

LAS PERSONAS:

En muchas formas, somos como el buitre, el murciélago y la abeja obrera.
Lidiamos con nuestros problemas y frustraciones,
sin nunca darnos cuenta que todo lo que tenemos que hacer es ver hacia arriba.
Esa es la respuesta, la ruta de escape y la solución a cualquier problema.
Solo mira hacia arriba!!.

LA TRISTEZA MIRA HACIA ATRÁS, 

LA PREOCUPACIÓN MIRA ALREDEDOR, 

LA DEPRESIÓN MIRA HACIA ABAJO, 

PERO LA FE    .....  LA FE SIEMPRE MIRA HACIA ARRIBA!!



EL HOMBRE DE NEGOCIOS Y EL PESCADOR


Un hombre de negocios tomaba unas vacaciones en un pequeño pueblo costero siguiendo las indicaciones de su médico. Sin poder dormir después de una llamada urgente de su oficina a primera hora de la mañana, salió a caminar por el embarcadero para poner en claro sus ideas. Un pescador estaba atando su pequeña embarcación en el muelle, dentro de ella, había varios pescados de buen tamaño. El hombre de negocios felicitó al pescador por sus habilidades de pesca.


-“¿Cuánto tiempo te llevó pescarlos?” le preguntó el hombre de negocios.
“Poco tiempo, alrededor de 2 horas” contestó el pescador. 


“¿Por qué no se queda más tiempo en el mar y atrapa más peces?” Replicó el hombre de negocios intrigado. 


“Bueno, con esto tengo suficiente para mantener a mi familia y compartir con mis amigos” el pescador le contestó mientras acomodaba a los pescados para ser transportados. 


“Pero… ¿ y qué hace el resto del día?” preguntó el alto ejecutivo. 


El pescador miró al hombre de negocios y le contestó “Duermo hasta tarde, pesco otro poco, juego con mis hijos cuando vuelven de la escuela, tomo una siesta con mi mujer  y después bajo al pueblo para ver a los amigos. La verdad es que tengo una vida bastante ocupada señor”. 


El hombre de negocios sonrió y le comentó al pescador “Yo tengo un MBA de una muy buena universidad y puedo ayudarlo. Si me permite el consejo, debería aumentar sus horas de pesca de 2 a por lo menos 6 horas al día. En poco tiempo, con lo que gane, puede comprar una embarcación más grande, con suficiente capacidad para que le permita trabajar de 8 a 10 horas y traer aún más pescados. A este ritmo, seguramente no pasará mucho hasta que pueda comprar más embarcaciones y ¡tener su propia flota!” 


Continuó: “En lugar de vender sus pescados a intermediarios, puede empezar a venderlos directamente al consumidor final, abriendo sus propias pescaderías, y eventualmente construyendo su propia cadena. Usted controlará el producto, todos los procesos intermedios y la comercialización, su empresa estará verticalmente integrada, aumentando aún más sus ganancias. Desde luego, ya no podrá vivir aquí, tendrá que mudarse a la capital  en donde implementará mejor los planes de expansión para su empresa. Eventualmente, podrá mover el corporativo de su empresa a otros paises  para internacionalizarla”.
El pescador, un poco confundido con los términos, preguntó. “Pero Señor, ¿cuánto tiempo me llevará todo eso?” El alto ejecutivo contestó, “No mucho, yo estimo que unos 20 a 25 años máximo.” 


“¿Y entonces que, señor?” preguntó el pescador. El hombre de negocios sonrió y dijo con un tono triunfalista, “Esa es la mejor parte. Entonces, cuando el tiempo sea el correcto, podrá hacer su empresa pública, vender sus acciones en la bolsa de valores y convertirse en un hombre muy rico. Ganará millones”


“¿Tanto dinero señor?, ¿y entonces qué?” 


“Entonces se podrá retirar en un pequeño pueblo al lado del mar donde se respire tranquilidad, dormir hasta tarde, pescar durante el día, jugar con sus hijos, tomar una siesta con su mujer por las tardes y ver a sus amigos en las noches, tomar vino y tocar la guitarra…”
                                 El pescador miró nuevamente al hombre de negocios y le contestó:

No he tenido los estudios, la preparación,  las empresas y negocios que tiene usted señor y ya estoy disfrutando de los beneficios que quiere usted obtener.

TODOS TENEMOS GRIETAS



Un cargador de agua de la India tenía dos grandes vasijas que colgaba a los extremos de un palo y que llevaba encima de los hombros.
Una de las vasijas tenía varias grietas, mientras que la otra era perfecta y conservaba toda el agua al final del largo camino a pie, desde el arroyo hasta la casa de su patrón, pero cuando llegaba, la vasija rota sólo tenía la mitad del agua.


Durante dos años completos esto fue así diariamente, desde luego la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, pues se sabía perfecta para los fines para los que fue creada. Pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección y se sentía miserable porque sólo podía hacer la mitad de todo lo que se suponía que era su obligación.

Después de dos años, la tinaja quebrada le habló al aguador diciéndole:

"Estoy avergonzada y me quiero disculpar contigo porque debido a mis grietas sólo puedes entregar la mitad de mi carga y sólo obtienes la mitad del valor que deberías recibir”. El aguador, apesadumbrado, le dijo compasiva mente: "Cuando regresemos a la casa quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino."
 Así lo hizo la tinaja.
Y en efecto vio muchas flores hermosas a lo largo del camino, pero de todos modos se sintió apenada porque al final, sólo quedaba dentro de sí la mitad del agua que debía llevar.



El aguador le dijo entonces "¿Te diste cuenta de que las flores sólo crecen en tu lado del camino? Siempre he sabido de tus grietas y quise sacar el lado positivo de ello. Sembré semillas de flores a todo lo largo del camino por donde vas y todos los días las has regado y por dos años yo he podido recoger estas flores para decorar el altar de mi Maestro. Si no fueras exactamente como eres, con todo y tus defectos, no hubiera sido posible crear esta belleza."
Cada uno de nosotros tiene sus propias grietas. Todos somos vasijas agrietadas, pero debemos saber que siempre existe la posibilidad de aprovechar las grietas para obtener buenos resultados.

LA BOTELLA (ARRIESGARSE)




Un hombre estaba perdido en el desierto, destinado a morir de sed. Por suerte, llegó a una cabaña vieja, desmoronada sin ventanas, sin techo. El hombre anduvo por ahí y se encontró con una pequeña sombra donde acomodarse para protegerse del calor y el sol del desierto. Mirando a su alrededor, vio una vieja bomba de agua, toda oxidada. Se arrastró hacia allí, tomó la manivela y comenzó a bombear, a bombear y a bombear sin parar, pero nada sucedía. Desilusionado, cayó postrado hacia atrás, y entonces notó que a su lado había una botella vieja. La miró, la limpió de todo el polvo que la cubría, y pudo leer que decía: "Usted necesita primero preparar la bomba con toda el agua que contiene esta botella mi amigo, después, por favor tenga la gentileza de llenarla nuevamente antes de marchar".

El hombre desenroscó la tapa de la botella, y vio que estaba llena de agua... ¡llena de agua! De pronto, se vio en un dilema: si bebía aquella agua, él podría sobrevivir, pero si la vertía en esa bomba vieja y oxidada, tal vez obtendría agua fresca, bien fría, del fondo del pozo, y podría tomar toda el agua que quisiese, o tal vez no, tal vez, la bomba no funcionaría y el agua de la botella sería desperdiciada. ¿Qué debiera hacer? ¿Derramar el agua en la bomba y esperar a que saliese agua fresca... o beber el agua vieja de la botella e ignorar el mensaje? ¿Debía perder toda aquella agua en la esperanza de aquellas instrucciones poco confiables escritas no se cuánto tiempo atrás?



Al final, derramó toda el agua en la bomba, agarró la manivela y comenzó a bombear, y la bomba comenzó a rechinar, pero ¡nada pasaba! La bomba continuaba con sus ruidos y entonces de pronto surgió un hilo de agua, después un pequeño flujo y finalmente, el agua corrió con abundancia... Agua fresca, cristalina. Llenó la botella y bebió ansiosa mente, la llenó otra vez y tomó aún más de su contenido refrescante. Enseguida, la llenó de nuevo para el próximo viajante, la llenó hasta arriba, tomó la pequeña nota y añadió otra frase: "Créame que funciona, usted tiene que dar toda el agua, antes de obtenerla nuevamente".

¿Cuántas veces tenemos miedo de iniciar un nuevo proyecto pues éste demandará de una inversión de tiempo, dinero, preparación y conocimiento?.
 ¿Cuántos se han quedado parados satisfaciéndose con los resultados mediocres?.

EL SACO DE PLUMAS (LA CALUMNIA)




Había una vez un hombre que calumnió grandemente a un amigo suyo, todo por la envidia que le tuvo al ver el éxito que este había alcanzado.

Tiempo después se arrepintió de la ruina que trajo con sus calumnias a ese amigo, y visitó a un hombre muy sabio a quien le dijo:

"Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo. ¿Cómo puedo hacerlo?", a lo que el hombre respondió: "Toma un saco lleno de plumas ligeras y pequeñas y suelta una donde vayas".

El hombre muy contento por aquello tan fácil tomó el saco lleno de plumas y al cabo de un día las había soltado todas.

Volvió donde el sabio y le dijo: "Ya he terminado", a lo que el sabio contestó: "Esa es la parte más fácil. Ahora debes volver a llenar el saco con las mismas plumas que soltaste. Sal a la calle y búscalas".

El hombre se sintió muy triste, pues sabía lo que eso significaba y no pudo juntar casi ninguna.

LOS AMIGOS


''Los amigos son como las estrellas, no siempre las ves pero sabes que están ahí''

Los amigos son tesoros que la vida nos regala y que debemos cuidar. Muchos de ellos nos acompañan tan sólo durante un trayecto y luego se van, otros forman parte de algunos de nuestros mejores recuerdos del pasado y otros se quedan en nuestras vidas para siempre. Este es un pequeño homenaje para los amigos que están y para los que ya se fueron...

Hay amigos eternos, amigos que son de piel y otros que son de hierro.
Hay amigos del tiempo, de la escuela, del trabajo, de la facultad.
Amigos que se aprenden, otros que se eligen, y amigos que se adoptan.
Hay amigos del alma, del corazón, de la sangre.

Hay amigos de vidas pasadas, amigos para toda la vida. Hay amigos que son más que amigos.
Hay amigos que son hermanos, otros que son padres; también hay amigos que son hijos.
Hay amigos que están en las buenas, otros que están en las malas, hay amigos que están siempre. Amigos que se ven, otros que se tocan, otros que se escriben. Por supuesto que hay amigos que se van, que nos dejan; hay amigos que vuelven y otros que se quedan.
Hay amigos inmortales, amigos de la distancia.

Hay amigos que se extrañan, que se lloran, que se piensan. Amigos que se desean, que se abracen, que se miran.
Hay amigos de noche, de siestas, de madrugadas. Hay amigos hombres, amigos mujeres, amigos perros.
Hay amigos que deliran, otros que son poetas. Hay de los que dicen todo, amigos que no hacen falta decirlos. Amigos nuevos, viejos, viejos amigos.
Hay amigos sin edad, amigos gordos, flacos. Hay amigos que no nos llaman, que tampoco llamamos. Con poco tiempo, amigos desde hace una hora, desde recién.
Hay amigos que dejamos ir, otros que no pueden venir, amigos que están lejos amigos del barrio.
Amigos de la palabra, amigos de lo ajeno, amigos incondicionales.

Hay también amigos invisibles, amigos sin lugar, amigos de la calle.
Amigos míos, amigos tuyos, amigos nuestros.
Hay muchos amigos; amigos en común, amigos del teatro, de la música, amigos de verdad.
Hay amigos que están tristes, otros que están alegres, otros que simplemente no están.
Hay amigos que se la pasan en la luna, otros en el campo, y otros en el cielo.
Todos, absolutamente todos los amigos tienen algo en común: son INDISPENSABLES.

lunes, 9 de mayo de 2016

MI MADRE, MI MEJOR AMIGA

Dos amigos se encontraban tomando un café, y uno le comenta en tono de queja al otro:
 Mi madre me llama mucho por teléfono a la oficina y solo para pedirme que vaya a conversar con ella; siempre la misma queja, que 'se siente sola'. La verdad, yo voy poco y en ocasiones siento que me molesta su forma de ser. Ya sabes como son los viejos: Cuentan las mismas cosas una y otra vez y sin mencionar los achaques que tiene cada día. Bueno, como tú sabes nunca me faltan los compromisos: el trabajo, los amigos, la Asociación.. .. En fin, ya sabes como es, ¿no?...

El otro amigo se queda callado, y luego responde:
Yo en cambio, converso mucho con mi madre. Cada vez que estoy triste, voy con ella; cuando me siento solo o cuando tengo un problema y necesito fortaleza, acudo a ella y ella me conforta, me da fortaleza, y siempre termino sintiéndome mejor.
¡Caramba! - se apenó el otro - Eres mejor que yo.

No lo creas, soy igual que tú, o al menos lo era - respondió el amigo con tristeza. En realidad visito a mi madre en el cementerio. Murió hace tiempo, pero mientras estuvo conmigo, tampoco yo iba a conversar con ella, ya que pensaba y sentía lo mismo que tú. Y no sabes cuánta falta me hace ahora su presencia, cuánto no daría por sentir las caricias que con tanto amor me prodigaba, y que yo rechazaba porque 'ya no era un niño'. O cuánto me pesa no haber escuchado todos los consejos que me daba, cuando con torpeza le decía: 'Yo sé lo que hago', y por ello cometí muchos errores. Ay amigo, si supieras ahora cómo la busco, y ahora es mi mejor amiga.

Cuando sentado en la tierra fría del camposanto mirando solo su foto en el muro gris, en el que le puse 'te quiero', (palabras que nunca escuchó de mis labios), le pido que me perdone por haber sido tan frío, por las veces que le mentí, y por los muchos besos que no le di, mas el silencio me responde y cuando una brisa acaricia mis mejillas, sé que ella me perdona.

-Mira con ojos empañados a su amigo y luego dice- Discúlpame este arranque, pero si de algo te sirve mi experiencia, conversa con ella hoy que la tienes, valora su presencia resaltando sus virtudes que seguro posee, deja a un lado sus errores, que de una u otra manera forma parte de su ser. No esperes a que esté en un cementerio porque ahí la reflexión duele hasta el fondo del alma, porque entiendes que ya nunca podrás hacer lo que dejaste pendiente. Será un hueco que nunca podrás llenar. No permitas que te pase lo que me pasó a mí.

En el camino, iba pensando en las palabras de su amigo. Cuando llegó a la oficina, dijo a su secretaria: Comuníqueme por favor con mi madre, no me pase más llamadas y también modifique mi agenda porque este día lo dedicaré a ella!.

¡¡No dejes pasar este día sin decir 'te quiero'!!